INAS BENGURÍA ROCA.- En Oriente Medio existen mártires desde que apareció el cristianismo. Ahora, los terroristas del Estado Islámico llaman nazarenos a los cristianos de Siria e Irak y marcan su casa con un símbolo (imagen), como hicieron los nazis con los judíos:

Lo que está ocurriendo en Siria e Irak es algo muy grave, triste, penoso. Las consecuencias de la guerra las sufren todos, pero las minorías -entre las que están los cristianos-, más. No pasa ningún día sin que los medios de comunicación hablen del ‘Estado Islámico‘ (EI, siglas en español/ISIS, siglas en inglés de EE.UU/ IS, en inglés británico), pero poco se habla de la comunidad cristiana.
Como católico, me duele ver el precio que han pagado, están pagando y pagarán mis hermanos cristianos del norte de Oriente Medio. Rezar es lo mejor que puedo hacer, pero no lo único. También puedo informarme bien para informar. Como estudiante de periodismo, pienso que en Occidente no se está explicando bien ni la guerra de Siria ni la persecución religiosa. El periodista tiene que protestar ante cualquier ataque a los derechos humanos, y en este caso tardaron. También es cierto que hoy en día no se puede ir ahí para informar.

Con ayuda de expertos en política internacional, teólogos, antropólogos, sociólogos…, doy espacio para reflexionar sobre por qué ocurren estas cosas en pleno siglo XXI y cómo nos afecta un conflicto situado a más de 5.000 km.
Os animo a comentar y compartir ideas en twitter con el hashtag #cristianosnun. Y si me despisto y no hablo de ellos, los marcados por una ن, los protagonistas, ¡decírmelo!
Salut!
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